Nos marcamos como objetivo evaluar los retos que conlleva el apagado de estas redes móviles y nuestra visión sobre cómo afrontar el desmantelamiento y migración de servicios para proveedores de servicio, empresas y organismos.
Si bien, hasta ahora, las nuevas generaciones de telefonía móvil han ido conviviendo con las tecnologías predecesoras (únicamente ha desaparecido la primera generación analógica), la aparición de 5G conllevará la desaparición de las redes 2G y 3G para poder aprovechar el espectro que ocupan. Y aunque existen funcionalidades que permiten compartir el espectro entre tecnologías (spectrum sharing), hay que tomar consciencia de que las redes 2G/3G acabarán apagándose.
El panorama es radicalmente diferente al europeo y se acerca más a Oceanía y Asia. En EEUU, 3 de los 4 grandes operadores (ATT, Verizon y T-Mobile) ya han apagado la red 2G, o han puesto fecha para hacerlo. Lo mismo ocurre en Canadá, con Telus y Bell, que ya han apagado su red 2G.
Todo apunta a que el apagado de redes 3G acontecerá con anterioridad al apagado de redes 2G. Y como se verá más adelante, parece que Europa será un caso particular y diferente al resto del mundo.
En algunos países como Japón, Macao, Singapur o Corea del Sur la red 2G ya no está disponible, mientras que en otros países, como Taiwán o Tailandia, el apagado de la red 2G está muy cercano.
Las razones son el elevado número de dispositivos 2G, el hecho de que los dispositivos 3G también soportan 2G, y que 2G podrá usarse como CS-Fallback para redes o dispositivos 4G sin VoLTE. También se apunta a la existencia de GSM hasta 2030.
Sigue la tendencia de Asia, decantándose de forma general por la priorización del apagado de la tecnología 2G. Telstra, Optus y Vodafone han apagado ya sus redes 2G en Australia, y en Nueva Zelanda, Vodafone es el único operador que aún ofrece el servicio de 2G.
La tendencia no está del todo clara y se encuentra en un proceso de definición. Colombia es uno de los países que, en estos momentos, está liderando el tema de los análisis de apagados 2G/3G, donde el regulador está definiendo una hoja de ruta para el apagado del 2G o, en su defecto, aprovechar la tecnología para la utilización como IoT o M2M.
La segunda generación móvil, 2G, también conocida como GSM (Global System Mobile Communications), fue la primera generación digital y la primera red global de comunicaciones celulares estandarizada por el ETSI (European Telecommunications Standards Institute) y adoptada en casi todos los países del mundo.
Las principales características de esta generación son:
- Desarrollo, principalmente, para transmisión de los servicios de voz, fax y SMS.
- Arquitectura de conmutación de circuitos para la realización de llamadas.
- División del tiempo en emisión y recepción mediante TDMA (Time Division Multiple Access).
- Separación de bandas para emisión y recepción, utilizándose portadoras de 200 KHz.
- Primera red que permitió la itinerancia a nivel internacional.
Con el paso del tiempo, y principalmente debido a la irrupción de internet, se añadió a las redes móviles mayor capacidad de transmisión de datos mediante GPRS (General Packet Radio Service). GPRS, por tanto, se puede considerar como un servicio de datos para los usuarios de GSM, pero utilizando conmutación de paquetes y técnicas de multiplexación. La velocidad de transmisión que se puede alcanzar mediante GPRS es, como máximo teórico, entorno a los 170 Kbps.
Con la penetración cada vez mayor de internet, y dadas las limitaciones del sistema 2G en cuanto al transporte de datos, aparece en la década de los 2000 el 3G, la tercera generación de telefonía móvil, de la mano de la tecnología UMTS (Universal Mobile Telecommunications System).
Las principales características de esta generación son:
- El núcleo de la red está basado en conmutación de circuitos y de paquetes.
- Utiliza la técnica de acceso CDMA (Code Division Multiple Access).
- Cada una de las portadoras tiene asignado un ancho de banda de 5 MHz.
- Posibilidad de realizar llamadas de voz y transacciones de datos.
- Velocidad de transmisión/recepción de datos hasta siete veces más rápida que 2G.
Con los smatphones, su ecosistema de aplicaciones y la continua evolución de internet, crece la demanda de velocidad de datos en las redes móviles. Es por ello que aparece el 4G, también conocido como LTE (Long Term Evolution), que actualmente está soportando la mayoría de nuestro tráfico móvil de datos.
Las principales características de esta generación son:
- Red basada en conmutación de paquetes, únicamente con solución “all IP”.
- Se ofrecen portadoras con distintos anchos de banda que pueden ir desde los 4 hasta los 20 MHz.
- Se introduce la voz a través del IMS (IP Multimedia System).
- Se implementa calidad de servicio extremo a extremo dentro de su red.
- Utilización de técnicas con múltiples antenas en transmisión y recepción (MIMO).
Con la nueva generación la evolución inminente va a ser mucho mayor y permitirá, además mayor eficiencia, mayores velocidades de datos y una mejora de los servicios.
Se espera que esto permita la entrada de otras verticales y ofrecer nuevas soluciones que hasta ahora se soportaban mayoritariamente sobre redes propietarias (p. ej. soluciones IoT).
En la actualidad conviven todas las tecnologías digitales. Pero esto va a acabar y en los próximos años vamos a asistir al apagado de las redes 2G y 3G.
Algunos de los factores que influyen en la decisión pueden ser:
apagar las redes 2G o 3G puede impactar en una reducción de la huella de cobertura, dejando de repente a clientes sin cobertura, y por consiguiente, perdiendo abonados. Antes de tomar cualquier decisión se debe realizar un estudio minucioso de este impacto.
otro factor que interviene es el parque actual de dispositivos y las tecnologías soportadas.
Por ejemplo, los dispositivos de M2M (Machine To Machine), tales como los terminales de pago de los puntos de venta, se apoyan mayoritariamente en redes 2G. Estos dispositivos son más difíciles de migrar a una nueva tecnología, por lo que los operadores que ofrecen estos servicios a un importante parque de clientes están optando, de momento, por mantener las redes 2G allí donde disponen de una base desplegada de servicios M2M.
Además, aún existen muchos clientes con dispositivos móviles que soportan únicamente 2G o 3G [principalmente en países con una economía poco desarrollada].
Según el último reporte de Ericsson (Mobility Report June), es de esperar un decrecimiento cercano a los 900 millones de abonados 2G/3G para 2024 en todo el mundo, lo que supone un descenso de cerca del 120% respecto a 2018. Pero hoy en día el número de suscripciones 2G/3G es aún muy importante.
los operadores, a menudo, necesitan mantener las redes tradicionales 2G o 3G para soportar servicios de voz, ya que la tecnología 4G, en principio, no soporta tal servicio en modo conmutación de circuitos.
Para remediarlo, la tecnología VoLTE [Voz sobre LTE – 4G] proporciona una solución más eficiente para servicios de voz que las tecnologías 2G y 3G. Pero VoLTE no está disponible en muchas redes 4G [alrededor de un 25-30% aún no han empezado o están en las fases iniciales del despliegue], por lo que de momento tienen que mantener las redes 2G/3G para los servicios de voz.
en algunos casos pueden existir imperativos regulatorios que influyan en el apagado o mantenimiento de las redes 2G y 3G. La regulación del espectro y de los servicios móviles es competencia de cada país, pues no existe un marco regulatorio común a nivel mundial.
el hecho de que algunos operadores inicien el apagado de sus redes tradicionales para dar cabida a las nuevas tecnologías, y por tanto a nuevos servicios, puede obligar indirectamente al resto de operadores a tomar acciones similares.
los operadores, a menudo, necesitan mantener las redes tradicionales 2G o 3G para soportar servicios de voz, ya que la tecnología 4G, en principio, no soporta tal servicio en modo conmutación de circuitos.
Para remediarlo, la tecnología VoLTE [Voz sobre LTE – 4G] proporciona una solución más eficiente para servicios de voz que las tecnologías 2G y 3G. Pero VoLTE no está disponible en muchas redes 4G [alrededor de un 25-30% aún no han empezado o están en las fases iniciales del despliegue], por lo que de momento tienen que mantener las redes 2G/3G para los servicios de voz.
en algunos casos pueden existir imperativos regulatorios que influyan en el apagado o mantenimiento de las redes 2G y 3G. La regulación del espectro y de los servicios móviles es competencia de cada país, pues no existe un marco regulatorio común a nivel mundial.
el hecho de que algunos operadores inicien el apagado de sus redes tradicionales para dar cabida a las nuevas tecnologías, y por tanto a nuevos servicios, puede obligar indirectamente al resto de operadores a tomar acciones similares.